La nueva modalidad de mensajes fraudulentos: `el smishing´. Un ciberdelincuente se hace pasar por una entidad bancaria o por una institución publica para así robar los datos del usuario.
Actualmente un 58% de las empresas españolas utilizan los mensajes vía texto para comunicarse con el cliente y esto ha llevado al aumento de estafas.
Para evitar caer en estas hay que recordar que, a través de SMS, una empresa nunca pedirá datos sensibles, así como, contraseñas, nombres de usuarios o números bancarios. Además, se debe desconfiar siempre que el mensaje vaya acompañado de un enlace inseguro (Y fiarse de aquellos precedidos por ` https: ´).
0 Comments